Un año más cogemos las maletas, los chubasqueros, los sacos de dormir y un montón de ilusión y nos vamos a Mérida con 1º de BTO. La mitad, alumnos del cole de toda la vida, la otra mitad, alumnos que vienen a nuestro cole llenos de ilusión y también algún que otro miedo ante lo desconocido, nuevos compañeros, nuevos profes, nueva etapa… Pasamos casi 3 días juntos compartiendo actividades de todo tipo, el albergue que se convierte en nuestro hogar por unas horas, el Museo Romano donde se escapa algún bostezo porque dormir no hemos dormido mucho, el paseo por la maravillosa Mérida con sus monumentos y donde nos hacemos miles de selfies, Santa Eulalia donde se bautizó nuestro querido Padre Cristóbal, el Hogar de Acogida que nos impresiona y nos arranca alguna lágrima con los testimonios de gente que ha sufrido mucho… a veces gente solo un poco mayor que nuestros alumnos, el Parque de Cornalvo y la parada en Trujillo antes de volver a casa, las risas y las canciones en el autocar… Todos nos dicen que es muy poco, que deberían ser más días y que lo han pasado genial.
Y cuando el autocar se para en la Calle Arboleda ya nos hemos olvidado quiénes son los nuevos y quiénes los antiguos, ya somo todos amigos… todos Nazarenos… y ya podemos empezar juntos este camino de dos años, este Bachillerato Nazareno, y lo haremos llevando una mochila cargada de energía y experiencias positivas, la que llenamos de recuerdos en Mérida.